Y ahora que salgo así,
sin ninguna descripción,
histérico quizás,
yo digo, modestamente,
que estoy más cuerdo que nunca
en mi imaginario obsoleto,
donde cualquier color me sirve
para hechar la corta
en la cara de algún buitre,
en la tumba de algún sicario indecente,
me cago de la risa
de mi mismo.

Tengo una guitarrita,
un cigarro y par de versos,
la pena más grande de mi afortunada existencia,
una mujer hermosa enterneciéndoce de mis webadas,
recuerdos pa' escribir lo que se me antoje,
soy cara de raja,
y tengo la raja limpia,
que cuea la mía
la de vivir y quejarme de mis quejas

Me pongo a pensar sobre el arte,
la existencia,
los misterios,
el sexo,
la masculinidad,
los fachos,
los comunachos,
mi país en el suelo,
mis sueños, los tuyos, los de ellos,
la mierda en cada esquina,
el tesoro de la rebeldía,
me pongo a pensar
y entre lineas me miro
y me veo desnudo
sobre el techo de una casita sobre el aire,
yo y mi cara blanca,
yo y lo que defiendo,
yo y mis inconsecuencias(...)

A ti te digo hermano,
a él lo siento enemigo,
a ella la siento vida,
a ellos a ellos...
quiénes son ellos?
¿Y qué me importa a mí,
un día cómo hoy,
donde salgo así,
según yo,
sin ninguna descripción,
histérico y cuerdo?

Nada,
no importa nada,
lo invito entonces
usted, a ti, a voh...
a cagarte de la risa,
total la verdad verdadera es puro cuento,
el surrealismo,
el arte,
el sexo,
la hembra,
el macho,
tu idea y la mía,
son un río de fuego
que corre hacia arriba,
buscando algún concepto que los autodefina,
que los tiente a ser algo más,
o algo menos,
al final,
cualquier instante puede ser la muerte
haciéndonos una reverencia,
y nosotros los perfectos,
podríamos descubrir al fin
la única verdad verdadera,
¿ Cuál es esa? -me importa una raja-

2 comentarios:

Jana. dijo...

Y es que, quizás la mentira es lo más cómodo. Pero, hasta esto que escribí es una mierda. Todo lo que afirmamos, con seguridad o con una falsa humildad, es una mierda.


Saludos, Fa. Saludos no-mierda.

Christine dijo...

Arriba de sus butacas, señores! Qué es la vida sino una sátira del absurdo?

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