Ahora la cuerda no está atada al cuello,
la libertad se posa sobre mi vientre
y deja su polen
Clavándome
Justo
en la miseria que me queda.
Ahora tengo las venas negras,
un huracán en el pecho,
me pongo desnudo antes ustedes
y me declaro
el nauseabundo más inútil de la galaxia
el claustrofóbico mental,
el burro más idiota
y el más exagerado.
El tiempo ha dejado de existir,
ha llegado desangrándose lentamente
hacia nuestras bocas.
Yo sigo caminando con el cuerpo lleno de espinas,
entre la multitud que me denomina
y me inscribe a su gusto.
Esta noche caeremos juntos todos,
la despedida es inminente,
no quiero ver caras,
somos todos reactores a
la muerte
al peso de ella
al sexo
a la miseria
al amor
a las manos ensangrentadas,
a la vida misma negándose naturalmente.
El camino está allí,
todo meado por los buitres
y recorrido por los futuros muertos.
Le pongo precio a mi cabeza,
el que quiera la poderosa muerte,
tengo un volcán,
una explosión en la boca,
tengo sangre en los dedos,
y mi propia muerte bajo mi pluma.
1 comentario:
Esa canción dice tantas cosas. Ellos decian tantas cosas, aun estan en nuestras memorias fá :)
cariños! espero que estes bien.
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