Qué hacemos amor, tu y yo, en este círculo de olvidadizos -eufemismo morboso- Venimos dando vueltas hace siglos, errando entre cabezas vacías y corazones egoístas, dimos tanto y recibimos tan poco. Construimos lenguajes, puentes entre dimensiones masacradas, levantamos la revolución emocional de la boca para afuera, y los otros se aprovecharon. Escuchamos sus risas como lo añoramos tanto, pero la amargura nos tiñó la boca.  Tu me miraste confundida, completamente absorta, y yo no supe que decir, la miseria escurría por toda mi piel. No entendimos el sentimiento, la sensación, todo se puso incoherente, la maldad asomó su perfil erótico y nos sonrío frente a frente. ¿O a caso fue la verdad? ¿la claridad pura y última, el conocimiento?

Yo te digo entonces mujer de los días grises,
sácate la máscara y déjate salir,
abre la boca y los ojos,
siéntete hoy, que estás en la cima de tus furias,
esta noche que tu corazón sangra y no se detiene,
tienes una bomba estelar enraizada en pecho,
tu existencia no conoce el fin ni el inicio de las cosas,

Entonces explota,
has tu reverencia e incendia esta tierra de hipócritas,
caminemos juntos hacia el próximo horizonte,
desnudos como siempre,
sinceros y sin miedos,
con los brazos y la boca abierta,
tu vientre será la cuna de mil revoluciones
y en tu mirada hermosa florecerán los campos del mundo nuevo,
libre y sincero,
las cadenas volarán en mil pedazos,
cubrirán nuestro cielo de simbólica venganza,
y tu sonrisa aparecerá como avalancha infinita
sobre la cabezas desesperanzadas,

y ahí estarán los hermosos y las hermosas,
con la boca llena de pajaritos
y el pecho firme como piedra vieja,
estarán esperándonos para partir,
de pronto el pasado se habrá transformado en viento cálido,
y los recuerdos llegarán como historias míticas,
tu boca y la mía alguna vez rebalsadas de sangre,
cantarán al futuro llenas de ironía,
con la vitalidad de los pasos perdidos y de las verdes noches sublimes,

iremos amor mío,
con la fuerza de los caídos,
y la sangre ardiente de los ingenuos,
a la guerra,
al caos emocional,
sin miedos,
sin rencores,
sin máscaras.



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